A pesar de que Italia es un país excelente para el esquí y el snowboard, el margen para la práctica del esquí libre (freeride) es un poco limitado ya que entrar en zonas prohibidas puede desembocar en una multa de 50€, además de ser ilegal la práctica fuera de pista sin una baliza de localización para avalanchas y un equipo de rescate. Esta política, implica que los lugares secretos están muy bien vigilados, para ello visite las amigables tiendas de snowboard en las que encontrarás algunos consejos útiles.

Las nevadas experimentadas en la mayoría de las estaciones italianas, por lo general, no pueden competir con las ocurridas en las estaciones ubicadas en la parte norte de los Alpes, cuyos registros destacan en la mayoría de las temporadas. Las nevadas de hasta aproximadamente 1m (alrededor de 3 pies) se producen, a menudo, durante temporales individualizados al final de la temporada y las estaciones como Cervinia, Madonna di Campiglio, La Thuile junto con las estaciones de Monterosa (Gressoney, Alagna), figuran habitualmente en esos registros. Italia es más templado que sus vecinos del norte y la línea de árboles a menudo llega a más de 2.000 metros, lo que es excelente para el esquí o el snowboard.

Italia tiene una gran diversidad de zonas para el esquí, con estaciones que van desde Courmayeur en el noroeste del país con pistas en la montaña más alta de Europa Occidental, hasta estaciones con pistas en las laderas del volcán Etna, en la sureña isla de Sicilia en el Mediterráneo.

Se puede esquiar en casi todas las partes del país, con estaciones que ofrecen esquí de travesía hasta Eslovenia en el noroeste, estaciones en el interior como las de Roma, al sur de la península central, y las montañas de los Apeninos hacia el norte.

Encontrará una gran variedad de tipos de estación en Italia. Una de las zonas más famosas, La Via Lattea, o Vía Láctea, en el noroeste del país, fue sede de la mayor parte de los eventos de los Juegos Olímpicos de Invierno de Turín en 2006. Incluyendo esquí transfronterizo hasta Montgenevre en Francia, que alberga Sestriere (Vía Láctea), siendo una de las primeras villas construidas a propósito para el esquí en el mundo, creada por la familia que fundó la compañía de automóviles Fiat en la década de 1930, mucho antes de que la primera aldea de esquí francesa fuera construída y a sólo unas pocas décadas después de la primera estación de esquí italiana en Claviere (Vía Láctea), otra parte de la Vía Láctea a unos pocos kilómetros de distancia.

En la parte nororiental del país, la región de Dolomiti Superski incluye más de 50 pueblos de esquí repartidos entre una docena de valles que en conjunto ofrecen más de 1.200km de pistas. Estas villas sin embargo tienden a ser más parecidas a los tradicionales pueblos de Austria, y por ellos pasa el 25% del mercado italiano de esquí; se encuentran en una zona conocida como el Tirol del Sur, que una vez fue parte de Austria.

La estación de Dolomiti Superski es una de las mayores áreas esquiables del mundo y sigue siendo la mayor en ofrecer un forfait completamente intercambiable desde el primer día (aunque se han desarrollado grandes zonas esquiables recientemente en Austria tienen más restricciones de uso). También contiene la segunda área de esquí más larga del mundo, la Sella Ronda, después de los 3 Valles, con pistas interconectadas. se trata de un famoso circuito de 23 kilómetros alrededor del gran macizo de Sella, del que parten enormes valles hacia afuera, como el famoso Val Gardena, así como Badia; famoso por su comida gourmet, y Fassa. En total, más de 500km de pistas conectadas, por delante de la Vía Láctea.

El esquí italiano es también famoso por sus precios, por lo general, de un 10 a un 20% por debajo del precio medio de estaciones de la misma categoría, e incluso más barato aún para salir a cenar o beber tanto dentro como fuera de la montaña. El ahorro es más notable entre las estaciones de Cervinia en Italia y Zermatt en Suiza, donde se puede esquiar con un forfait sustancialmente más barato si usted compra su pase en la parte italiana en lugar de la parte suiza. También podrá pagar hasta un 75% menos por un buen café hecho a mano en el lado italiano en lugar de uno obtenido en una máquina de autoservicio.

El paisaje de montaña italiano es otro punto fuerte, desde las escarpadas montañas alpinas del Valle de Aosta en el oeste, hasta los espectaculares precipicios rosados de las Dolomitas, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Y también, el famoso estilo italiano muy marcado en las estaciones más exclusivas, incluyendo Madonna di Campiglio y Cortina d'Ampezzo, pero visible casi siempre en todas partes.